Cuidados oncológicos vs. cuidados paliativos

Es común asociar o incluso considerar como uno mismo el tratamiento oncológico con los cuidados paliativos ya que es habitual que se le ofrezcan estos dos tipos de cuidados al paciente en un mismo momento velando por su salud y calidad de vida, sin embargo, cada uno es una práctica individual y diferente la una de la otra, aunque se complementen para mejorar el bienestar integral del paciente.

Los cuidados oncológicos se centran principalmente en el tratamiento de la enfermedad, como la cirugía, la radioterapia y la quimioterapia, con el objetivo de eliminar o controlar el cáncer. Por otro lado, los cuidados paliativos están diseñados para mejorar la calidad de vida del paciente al aliviar el dolor y otros síntomas asociados con la enfermedad, así como brindar apoyo emocional y espiritual tanto al paciente como a su familia. Además, los cuidados paliativos se pueden ofrecer desde el momento del diagnóstico hasta el final de la vida, independientemente de si el paciente está recibiendo tratamiento activo para el cáncer. Es importante destacar que los cuidados paliativos no excluyen los tratamientos oncológicos, sino que pueden complementarlos para proporcionar un enfoque integral y centrado en el paciente que aborde todas las necesidades físicas, emocionales y sociales durante el curso de la enfermedad.

Cuidados de seguimiento: oncología

Los cuidados de seguimiento oncológico son fundamentales después de recibir tratamiento para el cáncer, ya que permiten monitorear la salud del paciente y detectar cualquier signo de recurrencia de la enfermedad. Estos cuidados abarcan una variedad de aspectos, desde exámenes físicos regulares hasta pruebas específicas como análisis de sangre, radiografías, tomografías computarizadas y resonancias magnéticas, dependiendo del tipo de cáncer y el tratamiento recibido. Además, los pacientes pueden requerir evaluaciones periódicas de su función orgánica, como pruebas de función hepática o renal, para detectar posibles efectos secundarios a largo plazo de los tratamientos. Junto con el seguimiento médico, los cuidados de seguimiento oncológico también pueden incluir asesoramiento sobre estilo de vida, apoyo emocional y recomendaciones para la prevención de la recurrencia, como cambios en la dieta, ejercicio regular y estrategias para dejar de fumar.

Es importante que estos cuidados sean personalizados y continuos, adaptándose a las necesidades individuales del paciente y brindándole la tranquilidad de estar siendo cuidado de manera integral incluso después de completar el tratamiento inicial contra el cáncer.

Cuidado integral: cuidados paliativos y alivio del dolor

Los cuidados paliativos son un enfoque integral para aliviar los síntomas físicos, emocionales y espirituales de los pacientes con enfermedades graves, como el cáncer, y pueden brindarse en cualquier etapa de la enfermedad, independientemente de si el paciente está en una fase terminal o no. El manejo del dolor es una parte esencial de estos cuidados, ya que los pacientes pueden experimentar dolor debido al tumor en sí mismo, así como a los efectos secundarios del tratamiento como la quimioterapia y la radioterapia. Además de los medicamentos para el dolor, los cuidados paliativos pueden incluir una variedad de terapias complementarias, como la acupuntura, la terapia física, la terapia ocupacional y la musicoterapia, diseñadas para mejorar el bienestar general del paciente. No obstante, los cuidados paliativos no se limitan al alivio del dolor; también se ocupan de otros síntomas debilitantes como náuseas, fatiga, problemas para dormir, falta de apetito y depresión, utilizando un enfoque multidisciplinario que involucra a profesionales de la salud como médicos, enfermeras, trabajadores sociales, psicólogos y consejeros espirituales.

Adicionalmente los cuidados paliativos tienen como objetivo ayudar a los pacientes y sus familias a enfrentar la enfermedad de manera más efectiva, brindando apoyo emocional, asesoramiento sobre decisiones de tratamiento, ayuda para la planificación avanzada de cuidados y recursos para el manejo del duelo. En resumen, los cuidados paliativos proporcionan un enfoque integral y compasivo para mejorar la calidad de vida de los pacientes con enfermedades graves, ofreciendo una gama completa de servicios para abordar todas las necesidades físicas, emocionales y espirituales.

Las principales diferencias entre cuidados oncológicos y cuidados paliativos son:

Enfoque: Los cuidados oncológicos se centran en tratar el cáncer en sí, mientras que los cuidados paliativos se enfocan en mejorar la calidad de vida del paciente.

Momento de inicio: Los cuidados oncológicos generalmente comienzan después de que se diagnostica el cáncer, mientras que los cuidados paliativos pueden comenzar en cualquier momento durante el curso de la enfermedad.

Objetivo principal: El objetivo principal de los cuidados oncológicos es curar el cáncer o controlar su crecimiento y propagación. Por otro lado, el objetivo principal de los cuidados paliativos es mejorar la calidad de vida del paciente y aliviar los síntomas.

Duración del tratamiento: Los cuidados oncológicos pueden durar desde unos pocos meses hasta varios años, dependiendo del tipo y la etapa del cáncer. Los cuidados paliativos, por otro lado, pueden durar hasta el final de la vida del paciente.

Los pacientes con cáncer pueden recibir tanto cuidados oncológicos como cuidados paliativos, incluso esta es la recomendación en la mayoría de casos, ya que el beneficio para el paciente es mayor combinando ambas especialidades. Si tú o alguien cercano está enfrentando el cáncer, habla con tu médico sobre cómo los cuidados oncológicos y los cuidados paliativos pueden marcar la diferencia y cómo acceder a ellos.