
Aunque el hogar suele ser un sitio seguro para los adultos mayores, también puede ser un espacio donde los accidentes se presenten, si no se toman las medidas adecuadas. Pueden ocurrir desde caídas y tropiezos, hasta riesgos en el baño o la cocina. Sin embargo, muchas de estas situaciones pueden evitarse con simples ajustes en el entorno.
Dentro de las recomendaciones más importantes para acondicionar cada área de la casa y minimizar riesgos, aparecen:
En la habitación:
Ubicación: Es aconsejable que el dormitorio esté en la planta baja para evitar el uso de escaleras, reduciendo así el riesgo de caídas.
Acceso al baño: El baño debe estar cercano y el camino hacia él libre de obstáculos, bien iluminado, preferiblemente con luces LED o sensores de movimiento.
Interruptores accesibles: Coloque interruptores de luz cerca de la cabecera de la cama, junto al sillón y en la entrada de la habitación para facilitar su uso.
Mobiliario adecuado: Una silla o sillón cómodo al lado de la cama es útil, así como una mesita de noche para objetos de uso frecuente como gafas, medicamentos o controles remotos.
Ayudas para la movilidad: Ubique bastones, caminadores o sillas de ruedas al lado de la cama por el lado habitual de descenso.
Espacio funcional: Mantenga la habitación ordenada, con el mínimo de muebles necesarios para facilitar el movimiento y evitar tropiezos.
Iluminación adecuada: Adapte la iluminación según la capacidad visual y las actividades realizadas, utilizando lámparas adicionales si es necesario.
Medios de comunicación: Para personas con condiciones médicas que requieren monitoreo, es vital contar con un teléfono, celular o botón de pánico para solicitar ayuda en caso de emergencia.
Cámaras con sensores de movimiento: Ubique cerca a la cama, una cámara que cuente con sensores de movimiento para identificar cuando el adulto mayor se siente o se pare y poder intervenir de manera oportuna para minimizar las caídas.
En el baño:
Ducha segura: Instale barras de apoyo en la ducha y junto al inodoro para proporcionar estabilidad.
Superficies antideslizantes: Utilice alfombras antideslizantes dentro y fuera de la ducha para prevenir resbalones.
Accesibilidad: Considere la instalación de asientos de ducha y ajuste la altura del inodoro si es necesario para mayor comodidad y seguridad.

En el resto de la casa:
Iluminación: Asegúrese de que todas las áreas estén bien iluminadas, especialmente pasillos y escaleras.
Pisos seguros: Evite el uso de alfombras sueltas que puedan causar tropiezos; si las tiene, fíjelas adecuadamente al suelo.
Espacios despejados: Mantenga los pasillos y áreas de tránsito libres de muebles u objetos que puedan obstruir el paso.
Escaleras seguras: Si hay escaleras, instale pasamanos firmes y asegúrese de que los peldaños no sean resbaladizos.
Detectores de humo y gas: Instale y mantenga en buen estado detectores de humo y monóxido de carbono, verificando su funcionamiento periódicamente.
Implementar estas medidas contribuye significativamente a crear un entorno más seguro, reduciendo la probabilidad de accidentes domésticos y protegiendo la salud y bienestar, no solo de lo adultos mayores, sino también de todos los habitantes del hogar.


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