La falta de aire, la opresión en los pulmones, las sibilancias constantes y la tos seca son algunos síntomas que aquejan a quienes padecen de esta enfermedad. En la actualidad, hay cerca de unos 235 millones de personas en el mundo con asma y aunque aún no tenga cura, es perfectamente tratable, es decir, se puede controlar de forma eficaz.
Conociendo el asma infantil
Esta enfermedad respiratoria es más común en la población infantil, pero no es diferente al asma en los adultos. Sin embargo, los niños enfrentan desafíos especiales que quizás los acompañen durante todas las etapas de su vida. El asma afecta los pulmones y las vías respiratorias. Puede interrumpir el sueño, el juego y otras actividades diarias del niño. Aunque es controlable, el 50% de las personas no saben prevenir las crisis o los episodios asmáticos que pueden llegar incluso, a ser mortales. En Colombia las enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores, incluida el asma, son la tercera causa de muerte en el país.
Es necesario comprender el asma para mejorar el diagnóstico y encontrar el tratamiento adecuado. Los síntomas son claves en el reconocimiento de las crisis de asma y ocurren generalmente, cuando las vías respiratorias se inflaman y se estrechan, lo que dificulta la respiración. Pueden comenzar de forma rápida o gradual y varía según las personas, así como también la exposición, las condiciones y los desencadenantes que lo provoca.
Algunos síntomas presentes
Los síntomas pueden ser distintos en cada niño. Algunos tienen pocos síntomas en su rutina habitual, pero presentan crisis severas de asma de vez en cuando. Otros niños sufren síntomas leves o intensos solo en algunos momentos, como en la noche, cuando hacen actividades, cuando están resfriados o se exponen a factores que lo desencadenan como el humo de cigarrillo, los cambios de clima, entre otros. Los siguientes son algunos signos y síntomas más frecuentes:
Falta de aire
Dificultad para respirar
Dolor en el pecho
Tos seca
Sibilancias (silbido agudo que se produce al respirar)
Tos nocturna
Picazón en la garganta o en el cuello
Nariz tapada o moqueo
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Causas y factores desencadenantes
Numerosos factores contribuyen al desarrollo del asma infantil, a menudo es difícil identificar una única causa directa, sin embargo, están relacionados con la genética, la exposición a alérgenos ambientales, infecciones respiratorias virales y la contaminación del aire. Saber cuáles son sus desencadenantes y cómo evitarlos es crucial para abordar la enfermedad de manera integral. Estos pueden ser:
Tener familiares asmáticos, principalmente si son padres o hermanos.
Tendencia a desarrollar alergias como eccema o rinitis.
Algunas infecciones respiratorias que hallan ocurrido en edades tempranas.
Exposición a factores ambientales, como el humo de cigarrillo u otros contaminantes.
Alergias a los ácaros del polvo, moho, polen, olores fuertes, caspa o pelos de animales.
Actividad física exagerada.
Aire de escasa calidad o muy frío.
Estrés emocional, como enojo, llanto o risa intensa.
Diagnóstico y tratamiento
El diagnóstico temprano del asma infantil es esencial para un manejo efectivo. Los profesionales de la salud utilizan pruebas de función pulmonar, evaluaciones clínicas y análisis de síntomas para confirmar el diagnóstico. El tratamiento suele incluir medicamentos inhalados para controlar la inflamación y los síntomas agudos. Crear junto con el médico un plan de acción por escrito ayuda a controlar los síntomas, evitar las crisis asmáticas y adecuar cada vez más el tratamiento.
Manejo del asma desde casa
La prevención desempeña un papel crucial en el manejo del asma infantil. Además, la educación del paciente y la familia sobre el uso adecuado de los medicamentos y la identificación de desencadenantes son fundamentales para el manejo de la enfermedad. Estas son algunas recomendaciones útiles que pueden ayudar:
Mantener las ventanas cerradas y evitar las actividades extenuantes al aire libre si la calidad de este es baja.
Evitar la exposición al humo del tabaco, vapeador y leña.
Tener el esquema de inmunizaciones al día, incluyendo la vacuna anual contra la Influenza (gripe).
Eliminar el polvo y el moho del hogar.
Conservar los aires acondicionados o ventiladores limpios.
Fomentar estilos de vida saludables también ayuda a reducir los síntomas.
El asma es una condición común que no tiene cura, pero es manejable. Afecta a niños y adultos en todo el mundo, ocasiona consultas a urgencias, hospitalización, ausencias en las aulas escolares y en el trabajo. Algunos niños dejan de tener asma con el tiempo, pero por causas desconocidas, puede reaparecer en la edad adulta. Lo más importante es que con el tratamiento adecuado, hasta el asma severa se puede mantener bajo control. Buscar atención médica es clave para ayudar a mejorar la calidad de vida de quienes sufren esta afección. Para más información consulta por neumología con el Centro Especializado en el Cuidado de la Salud Respiratoria del HIC 6394040 Opción 1 o al +57 317 366 9369.
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