
Definición: operación que bajo condiciones especificadas establece, en una primera etapa, una relación entre los valores y sus incertidumbres de medida asociadas obtenidas a partir de los patrones de medida, y las correspondientes indicaciones con sus incertidumbres asociadas y, en una segunda etapa, utiliza esta información para establecer una relación que permita obtener un resultado de medida a partir de una indicación.
Objetivo: Asegurar que las mediciones obtenidas de los instrumentos sean confiables y se encuentren dentro de los estándares adecuados de funcionamiento.